Vino de tradición española. Seco como consecuencia de haber sido elaborado con mosto completamente fermentado. Es criado con la técnica “bajo flor” lo que provoca su color pajizo o dorado pálido con sabor almendrado. Generoso y fortificado, superando los 15° de alcohol. Con aroma avellanado, se percibe suave, equilibrado y elegante. Servido frío a una temperatura entre 9 ºC y 11 ºC es el aperitivo por antonomasia. Compañero ideal de pastas, mariscos, jamón ibérico, aceitunas, patés, quesos suaves, tapas y delicatessen. Su tradición en Argentina, se destaca como aperitivo en restaurantes, muchas veces ofrecido de cortesía.
Rodeados por un paisaje de ensueño, con la Cordillera de los Andes como telón de fondo, Bodega FLORIO abre sus puertas.
La tradición vuelve a conquistarte.
La tradición vuelve a conquistarte.
Contactate y te responderemos a la brevedad.